Al iniciar un año nuevo, inmediatamente queremos trazarnos metas y objetivos ya sea por motivos financieros o por autoestima.
Pero, después de los días festivos, viene la pereza y ya para finales de enero la mayoría de nosotros no mantenemos nuestros propósitos iniciales y esto puede llegar a aumentar nuestra ansiedad.
Lo que muchos de ustedes no saben, pues nos hemos guiado por tradiciones, es que la época de año nuevo no debe ser utilizada para realizar cambios de carácter extraordinarios. Es un tiempo para agradecer lo bueno y también lo malo, pues de ello se aprendieron lecciones y sobretodo debe ser un tiempo de reflexión acerca de nuestro comportamiento del año pasado y un examen de los cambios positivos que podemos realizar en nuestra vida.
Las resoluciones más comunes que generalmente la gente hace en estas épocas son:
– Perder peso
-Hacer ejercicios
-Tomar Clases de Baile
– Beber menos alcohol
– Aprender algo nuevo
– Comer sano y adoptar una dieta equilibrada.
– Saldar las deudas y ahorrar.
– Pasar más tiempo con la familia.
– Viajar y conocer lugares nuevos
– Deshacerse de una relación tóxica
– Iniciar una relación
Sin embargo, hace poco leí un artículo que me sorprendió mucho. En él, el autor aconseja no confiar en nuestra voluntad, pues la misma surge de una parte del cerebro, la corteza pre frontal, que se sobrecarga y agota fácilmente. Lo que funciona mucho mejor, dicen los expertos, es entrenar otras partes del cerebro responsables de vincular las emociones positivas a los nuevos hábitos y acondicionarse a nuevos comportamientos.
¡Bah! Difiero con el autor porque me baso en mi propia experiencia. Mi lema será siempre ¡Si se puede!
Te voy a dar cuatro “tips” que me ayudaron a concretar mis metas hace algunos años y a mantener los logros alcanzados.
Haz una lista
Bueno eso lo hace todo el mundo pero ésta tiene que ser diferente. En la misma, debes escribir el objetivo, el tiempo o plazo para realizarlo y los medios a los que debes recurrir para alcanzarlo. Lo mejor es escribirlo en una libreta, agenda o en un “Tablet”.
Se realista:
En primer lugar las metas deben ser realistas y tienes que mantenerlas y saber porque quieres llegar a lograrlas. Por ejemplo tu querrás bajar 50 libras en una semana pero eso es imposible. Entonces lo correcto sería trazarte la meta pero a largo plazo y comprometerte a llegar al objetivo de manera disciplinada y paulatina.
Forma tu grupo
Unirte a un grupo de apoyo para alcanzar tus metas no solo aumenta la motivación sino que resulta más divertido. Por ejemplo, cuando retomé el patinaje como fuente de cardio, lo hice con un grupo de amigas.
Si alguien está en el proceso de dejar de fumar, lo más conveniente es buscarse un grupo de amigos o colegas que compartan tu deseo y con quienes puedes compartir tus luchas, frustraciones y el camino se te hará más fácil.
Apóyate con profesionales
Aceptar ayuda de las personas que te dan fuerza para mantener tus metas es fantástico, pero nada mejor que un profesional en la materia.
Para ello, les puedo dar mi ejemplo. Mi objetivo en el 2015 era bajar el peso que gané después de mi operación de la columna. Para ello busqué un nutricionista, un entrenador que vigilara mis ejercicios para evitar lastimarme y por supuesto una buena estética para consentirme.
A veces es también sano acudir a un psicólogo para entender la conexión entre la mente y el cuerpo. Puede ofrecerte estrategias para ajustar tus metas a un nivel más alcanzable, y al mismo tiempo puede ayudarte a cambiar tu comportamiento y descargarte de asuntos emocionales.
Recuerda que “la perfección no es alcanzable”. Y nada nos llega de la noche a la mañana. El alcanzar nuestras metas es todo un proceso de ensayo y error. No te des por vencido(a) y aprecia cada pequeño paso que te acerca al éxito. ¡Suerte!
Fotos: Exteriores: Omar Simoza. Estudio: Yole Samudio. Vestuario: Vassa Mujer
Hola Tania. Te deseo un excelente 2018. Bueno, te cuento que mi primer objetivo es quitarme de la mente el «no puedo». Llevo unos meses pagando un gym y solo he ido tres veces. Con eso te digo todo. No sé por qué me es tan díficil, levantarme e ir al gym. Sin embargo, te sigo de hace un tiempo y admiro las cosas que haces por ti y para ti. Al igual que admiro a otras personas que también les cuesta, pero lo hacen. Realmente espero quitarme ese «chip» tan negativo y empezar a hacer algo por mí. Saludos.
Saludos Kristel y gracias por tus palabras. Al principio no es fácil, pero a medida que tengas constancia y veas los resultados te irás motivando cada día. Como menciono en el blog, busca un grupo de amigas y entre ustedes pueden animarse. Te deseo mucha suerte y feliz año!